miércoles, 29 de noviembre de 2023

Real Academia Española incorpora nuevas palabras




 «Alien», «chundachunda», «balconing», «VAR» (acrónimo de videoarbitraje), «machirulo», «bracket» o «perreo» son algunas de las nuevas y variopintas palabras que se han incorporado a la 23.7 versión digital del Diccionario de la Lengua Española (DLE), que se ha presentado este martes en la Real Academia Española y que ha actualizado 4.381 términos entre novedades, enmiendas y modificaciones. La exposición ha corrido a cargo del director de la RAE y presidente de la ASALE, Santiago Muñoz Machado, y la responsable del Instituto de Lexicografía, Elena Zamora. Entre la cosecha de innovaciones encontramos “aquaplaning”, “oscarizar” o “sexting», términos que tienen su origen en campos tan extensos y vivos como gastronomía, ciencia, cine o medicina; también se han hecho hueco en el diccionario formas complejas como “fila cero”, “masa madre” o “pobreza energética”, ya que “las actualizaciones se nutren en función del caudal léxico y de la observación del entorno”, ha explicado Zamora.

Entre las curiosidades, el director de la RAE ha destacado los ejemplos de «crack» o «sinhogarismo», «una palabra de la que se ha hecho una fuerte campaña, pero no obedecemos a subastas solo se incorporan por el uso generalizado», ha aclarado.
Ya se pueden buscar «palabras típicamente españolas» como «chundachunda» (música fuerte o machacona) o la nueva acepción de «petaca» como la «broma típica de colegio mayor en la que se doblaban las sábanas y no se podían estirar las piernas». La salud suma numerosas adiciones como «endodoncia» que contenía una «explicación muy técnica» y se ha añadido una más «explicativa», también se añaden «presoterapia» o «implantología».

Explicación
La explicación técnica de lo que cambia en el Diccionario la ha ofrecido la directora del Instituto de Lexicografía, Elena Zamora, quien ha subrayado que, como siempre, las novedades están aprobadas por las 23 academias de la lengua del ámbito hispanoamericano. Zamora ha realizado una breve demostración sobre la función de inclusión de sinónimos y antónimos. Si tecleamos la palabra notorio, por ejemplo, se ve que se ha añadido un botón azul: sin./ant. Hay otra opción, ya que a continuación de cada una de las acepciones de una palabra aparecen sus sinónimos o antónimos, las que los tengan. Son en total 42.882 los artículos del DLE que contienen sinónimos y 9.970 con antónimos. El sumatorio da 260.188 sinónimos y 20.091 antónimos.
Otras novedades reseñables son la incorporación a tóxico de la acepción como influencia nociva o perniciosa sobre alguien; o posturear, verbo nacido de postureo, sustantivo que ya estaba en el Diccionario; videoarbitraje y su acrónimo VAR, como “sistema de vídeo empleado como ayuda al árbitro, que permite volver a ver una jugada que acaba de ocurrir”, georradar. Además, se agregan numerosas voces relacionadas con internet y las redes sociales, como pixelar (con sus derivados, pixelación y pixelado), que es “alterar una imagen, haciendo que se vea en píxeles grandes poco nítidos; banner (en cursiva, como mensaje publicitario en una web), big data (aunque se prefiere macrodatos) y cookie (pequeño archivo de texto enviado por un sitio web y almacenado en el navegador del usuario, cuyas preferencias captura).


«Pixelar» o «Big data», entre las novedades de Internet

La actualidad se abre paso en el ámbito de la sexualidad y el género con términos como «no binario» o «disforia de género», donde se diferencian la identidad de género o sexual, asimismo hay modificación entre «matriarcado» y «patriarcado» para evitar «el sesgo». Con respecto a «machirulo», «es la expresión coloquial y despectiva, de una persona especialmente un hombre que exhibe una actitud machista», reza la RAE.
O la palabra «perreo», definida como «baile que se ejecuta normalmente a ritmo de reguetón, con eróticos movimientos de caderas, y en el que cuando se baila por parejas, el hombre se coloca habitualmente detrás de la mujer con los cuerpos muy juntos». Las nuevas tecnologías, la ciencia y las redes sociales siempre añaden un buen puñado de voces, una de las más subrayadas por los académicos ha sido «tecnociencia» y las enmiendas de «georradar». En medioambiente, algunas de las nuevas entradas son: «descarbonizar», «biocapacidad» o «huella ecológica». Los extranjerismos de uso común como «pixelar», «big data» (aunque se da preferencia a macrodatos), «cookies» o «banner» (mensaje publicitario en una web), ya están en el diccionario de pleno derecho.
Más lo que parece un guiño al cine y al cómic como la mítica «criptonita» que remite a la infancia y a Superman, pero también a «persona o cosa que neutraliza o merma las cualidades principales de algo o alguien», o los rivales de los superhéroes que ya «se habían colado», y que ahora comparten su espacio con «los supervillanos y supervillanas».
Mientras que la sopa de letras de la gastronomía atesora palabras de las recetas tradicionales como «cochifrito», «regañá» (lámina pequeña y fina de pan crujiente) o «colín», en una minisección dedicada al pan. Se añaden también nuevas acepciones a palabras ya recogidas, como el término «tóxico», que ya no se aplica únicamente a una sustancia sino a aquello «que tiene una influencia nociva o perniciosa sobre alguien», en referencia a una relación tóxica.
Los vocablos no aterrizan en el DLE a velocidad de crucero, al contrario, la media es de unos dos años entre los debates lexicográficos y los plenarios con el resto de academias latinoamericanas, ha señalado Santiago Muñoz Machado. Un DLE que esta edición estrena la consulta de antónimos y sinónimos por primera vez «en una obra de este tipo en el mercado». En total, en el diccionario hay 42.882 sinónimos y 9.790 antónimos para saciar el hambre de palabras.

Atención
El ámbito de la sexualidad añade los términos no binario y disforia de género. El primero es, dicho de una persona, aquella que no percibe su identidad de género en términos binarios de hombre o mujer. El segundo, procedente de la psiquiatría, es la angustia o malestar persistente en una persona causados por la falta de correspondencia entre su sexo biológico y su identidad de género. También el despectivo y coloquial machirulo (o machirula): persona, especialmente un hombre, que exhibe una actitud machista (aunque aún no está señoro). Y sexting, envío o intercambio de imágenes o mensajes de texto con un contenido sexual explícito a través de un dispositivo electrónico.

Enchufable
El medioambiente es un campo que también se renueva, como biocapacidad, descarbonizar, corredor ecológico o las formas complejas huella de carbono, huella ecológica y huella hídrica. O enchufable, para el vehículo con batería que se recarga desde una red eléctrica. De la gastronomía, entran retrogusto, como conjunto de sensaciones gustativas que quedan después de haber probado un alimento o una bebida, y hay un apartado relacionado con las piezas de pan, ya que entran voces como pico y regañá. De otras palabras relacionadas con el pan, como colín y palito, y cochifrito, se enmiendan sus acepciones.
De la música llegan los términos chundachunda —música fuerte y machacona— y perreo —baile que se ejecuta a ritmo de reguetón, con eróticos movimientos de caderas, y en el que, cuando se baila por parejas, el hombre se coloca habitualmente detrás de la mujer con los cuerpos muy juntos—. Una definición que hay que reconocer es muy certera.

Kriptonita
Del cine, la radio, la televisión y el cómic, igualmente hay cambios. Ingresan microfonista, la persona responsable del control y posición de los micrófonos durante una filmación cinematográfica, una emisión televisiva o una función teatral. Y una que ya se usaba regularmente, oscarizar: premiar con un Oscar. En lo que parece un homenaje a Hitchcock ingresa macguffin: motivo argumental que hace avanzar la trama, aunque no tenga gran relevancia en sí mismo. Y siguiendo con el cómic y el cine, supervillano y kriptonita o criptonita, que surgió del tebeo Superman, con dos definiciones: sustancia que debilita al protagonista y anula sus poderes, en este caso el superhéroe que vino del planeta Krypton. Y la persona o cosa que neutraliza o merma las cualidades principales de algo o de alguien. Una curiosidad: el término porsiacaso (así, todo junto) estaba ya como un tipo de alforja propia de Argentina y Venezuela. Ahora asimismo es “cualquier cosa que se tiene o se lleva en previsión de necesitarla”.
De la política y las ciencias sociales se han modificado acepciones, como estado de sitio o intervencionismo, y se han incorporado de los tiempos actuales neoconservador, que remite a neoconservadurismo: ideología política y económica de tendencia conservadora, surgida en Estados Unidos en la década de 1980, que propugna el capitalismo de libre mercado. Igualmente, sinhogarismo, que es la circunstancia de la persona que carece de hogar donde vivir. Entre las aportaciones que han aterrizado desde América, Muñoz Machado ha señalado la locución pura vida, que tiene hasta seis acepciones en Costa Rica para referirse a una persona agradable, o que goza de buena salud, o una cosa buena o, útil para este texto, una expresión coloquial de saludo y despedida.

Con información de RTVE/El País/